Por Prof. Héctor Daniel De Arriba
El profesor en historia e investigador independiente Héctor Daniel De Arriba, publicó en octubre del 2022 su último libro sobre tres aspectos sangrientos de la década 1945-1955, en la historia Argentina. Se titula LOS MUERTOS DE PLAZA DE MAYO: 1945, 1953 y 1955. Editorial Dunken, con 368 págs. Ampliamente documentado con Anexo fotográfico y varios testimonios de familiares de las víctimas. Como consecuencia de los sucesos del 16 de junio de 1955, falleció el felicianense José Francisco Ramón Goiri.
El 18 de octubre de 1945, en las primeras horas de la madrugada, fallecieron dos jóvenes que habían participado de la concentración en la Plaza el día anterior, vivando al coronel Juan D. Perón. Darwin Ángel Passaponti (santafesino, 18 años, estudiante de secundario) y Francisco Ramos (argentino, 21 años, empleado) cayeron muertos en la vereda del edificio del desaparecido diario Crítica. Ambos fueron al cementerio de Chacarita, pero los restos de Darwin descansan actualmente en el cementerio local de Moreno GBO, junto a sus padres Trento y Enedina, ambos farmacéuticos. Darwin tuvo mayor recordatorio por ser su joven vida rescatada por el justicialismo. Algunos de sus parientes colaterales viven aún en Moreno y Córdoba. Se entrevistó a una sobrina de Darwin.
El 15 de abril de 1953, cuando se desarrollaba un acto de la CGT en Plaza de Mayo y hablaba el presidente Perón estallaron dos bombas. La segunda mató a seis personas (una mujer –Santa Festeggiatta de D´Amico y cinco varones; de éstos, tres eran trabajadores de la línea de subterráneos – Osvaldo Mouché, Mario Pérez y Salvador Manes- más el taxista José Ignacio Couto y el miembro del sindicato de la madera León David Roumieux) cuyas vidas y fotos aparecen en el segundo capítulo del libro. Fueron entrevistados algunos descendientes de esos muertos, como el nieto de Osvaldo Mouché.
El 16 de junio de 1955, cuando la gente esperaba un desfile de aviones sobre Plaza de Mayo, a las 12.40 horas comenzaron a caer bombas de explosión y fragmentación sobre la Casa de Gobierno, parte de la Plaza, las avs. Paseo Colón e H. Yrigoyen y más tarde también sobre el barrio de Recoleta y Av. Crovara en La Matanza. El gravísimo hecho produjo 214 víctimas -cifra relevada por el autor pero no cerrada, pero basada en numerosos documentos examinados en diversos repositorios.
La mayoría de las víctimas eran de la zona sur del GBA (Lomas de Zamora, Lanús, Avellaneda, Berazategui, Quilmes, La Plata, Monte Grande).
También fallecieron vecinos de la zona norte del GBA y de La Matanza; muchos porteños; 9 granaderos; un general, policías y civiles, extranjeros y argentinos, de distintas actividades y edades.
Una víctima era entrerriana: José Francisco Ramón Goiri; oriundo de San José de Felciano.
Había nacido en San José de Feliciano el 29 de enero de 1910, siendo bautizado en la parroquia Nuestra Señora de la Paz –del departamento La Paz- el 03 de septiembre del mismo año. Fueron sus padres Cleto (español de Viscaya, comerciante) y Remigia Machicote (natural de aquella ciudad; en el censo de 1895 ella aparece registrada con 8 años junto con 4 hermanos. Sus antepasados arribaron allí en la primera mitad del siglo XIX -procedentes de Navarra)
José tuvo una llamada María Prudencia (1912-1998; c. c. José Pedro Zaragoza -1903-1981, padres de dos hijos). Los progenitores habían contraído matrimonio en La Paz el 20 de febrero de 1909.
José Francisco era empleado del Ministerio de Hacienda –hoy Ministerio de Economía-Murió por herida desgarrada con hundimiento hueso frontal lado izquierdo. Su cuerpo fue llevado al Policlínico Argerich.
Vivía en Beauchef 401, 1° 5.-Capital Federal. Estaba casado con María Clara Cardesse (porteña, n. 1916; hija de Juan Pedro –francés- y Magdalena Cazenave) desde el 5 de diciembre de 1946 y era padre de María de las Mercedes (n. 23-10-1947). En el aviso fúnebre del diario La Prensa lo despidieron su esposa, la hija, su madre y otros deudos. Entró al cementerio de Chacarita el día 17 (9-2-1/4).
Dejó como bienes sucesorios: el departamento familiar, otro departamento en Mar del Plata y un terreno en Castelar, municipio de Morón.
Junto con otros 7 empleados, fue el Ministerio mencionado el que más víctimas civiles tuvo.
El libro posee como objetivo, rescatar para el futuro la vida trunca de las víctimas inocentes de las tres fechas y recordarlas más allá de sus nombres y apellidos. Libros, diarios, revistas, obituarios, archivos documentales fueron revisados y leídos por el profesor para dar a luz una obra no partidista, que trae al presente argentino las muertes de una década del siglo XX.
Detrás de cada nombre y apellido muerto hubo un ser humano.
Prof. Héctor Daniel De Arriba