Este lunes a las 20:00 horas, en las instalaciones de la Casa del Bicentenario, se dio inicio a un nuevo período de sesiones ordinarias del Concejo Deliberante de nuestra ciudad. La jefa comunal acompañada por su equipo de trabajo brindó su último informe a los concejales y vecinos presentes sobre el estado general de la administración y las acciones realizadas durante el 2018 desde las áreas municipales.

 

 



 

Inicio del discurso brindado por Silvia Moreno:

 

Hoy me invaden sensaciones encontradas y muy sentidas, durante 8 años, todos los días, recordé la gran responsabilidad asumida y esto fue mi incentivo permanente, siento nostalgia y un poco de pena por lo que no se pudo concluir, siento resignación pero generó en mí nuevos desafíos de colaborar desde donde este para que se concreten. Puedo decirles de todas maneras: misión cumplida.

 

 



 

He dedicado parte de mi vida con mucho orgullo, y con pasión a desempeñar este mandato popular, postergando muchísimos proyectos personales, pero sabiendo que en cada gestión llevada adelante estaba y está la posibilidad de mejorar la vida de la gente, digo vale la pena, valen las horas de trabajo, valen los desvelos, valen los agotamientos físicos y del alma, porque así lo asumí desde el primer día de gestión.

 

Este proyecto fue posible gracias a la colaboración de muchísimas personas, fue el trabajo en equipo fundamental en la gestión, debo destacar de ustedes señores concejales que han acompañado a este mandato, desde su rol y asumiendo responsabilidad institucional, las condiciones necesarias se han dado para que en nuestra ciudad se vea hoy un “recambio educativo, social y cultural”.

 

Desde mi primer desarrollo de gestión ante ustedes, lo recordarán, plantee la necesidad de hacer política institucional teniendo como centro a la persona y su calidad de vida, trabajar mancomunadamente con la finalidad de restituir derechos, escuchando cada necesidad, reafirmando nuestra identidad e idiosincrasia.
Pude escuchar el sentir de una comunidad, que demandó y exigió a esta servidora, esto hizo que pueda plantear nuevos paradigmas, nuevas formas de convivir, nuevas miradas, dando lugar a la diversidad de voces y de pensamientos, más aun reforzándola con la presencia y acompañamiento de instituciones, de organizaciones, y de la comunidad en general.